El ministro de la Corte Suprema de Justicia Eugenio Zaffaroni formalizó esta mañana su anunciada decisión de abandonar el máximo tribunal a partir del 31 de diciembre próximo, al enviar a la presidenta Cristina Fernández de Kirchner su carta de renuncia.
“Motivan esta dimisión razones normativas y, más lejanamente, éticas y de convicción personal”, señaló el juez en la misiva, al tiempo que indicó que “secundariamente” pesa en su decisión la idea de que los cargos vitalicios son más adecuados a “los sistemas monárquicos” y “menos compatible con los principios republicanos”.
“No puedo ocultarle que, en los últimos meses, experimento la sensación de que mi tarea en este Poder está agotada, junto con la urgencia en volver a la actividad académica, tanto en el país como en la Patria Grande”, señaló Zaffaroni en el escrito.
Además, en el texto, el ministro expresó a la mandataria, “por el bien de todos los habitantes de nuestra Patria”, sus “fervientes votos por la exitosa culminación de su mandato constitucional, como también por su felicidad y ventura personal, y la de todos los suyos”.
“Tengo el honor de dirigirle las presentes líneas para elevar a su fina consideración mi renuncia al cargo de Ministro de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, para el que fui designado por el presidente Néstor Kirchner mediante decreto 932 de 2003, y que asumí hace hoy exactamente once años”.
Zaffaroni indicó que “el motivo fundamental, que no requiere mayor explicación, finca en el acatamiento a lo dispuesto en el tercer párrafo del inciso cuarto del artículo 99 de la Constitución Nacional”.
“La idea de la vitalicidad de los funcionarios de la Constitución, si bien excepcional, siempre es más adecuada a los sistemas monárquicos y, por ende, menos compatible con los principios republicanos”, sostuvo Zaffaroni en otro tramo de su carta de renuncia que remitió, con fecha de hoy, a once años de su asunción como ministro de la Corte.