Grimson es Doctor en Antropología por la Universidad de Brasilia, investigador del CONICET, docente del Instituto de Altos Estudios Sociales (IDAES) de la UNSAM y forma parte del consejo de asesores del presidente Alberto Fernández. Hoy por la mañana dialogó con Todas Las Voces, por AM 1330 Rosario, acerca de su libro.
“El libro abarca ocho momentos clave de la historia del peronismo: El surgimiento en 1945, el derrocamiento de Perón en el ‘55, el ‘73, los noventa… hasta la actualidad, y que va encontrando algunas cuestiones centrales de esa historia como el hecho de que en todas esas fotografías el peronismo fue fuertemente heterogéneo, siempre tuvo diversidad ideológica”, comenzó explicando Grimson. A continuación agregó que “en 1945 estaba el partido laborista, estaba la junta coordinadora radical, estaban los conservadurismos populares de provincia y Perón fue en ese momento la síntesis de esa diversidad. Y esa misma situación entre diversidad y síntesis se planteó de distintas maneras a lo largo de la historia del peronismo y se está planteando hoy en la Argentina también. En algunos momentos, por ejemplo en el año ‘74, el peronismo no logró construir una síntesis de su heterogeneidad y eso derivó en una tragedia, primero para el peronismo y después ya para todo el país”.
Consultado sobre cómo se le explicaría a un extranjero que preguntase qué es el peronismo, Grimson comenzó aclarando que “depende si es un extranjero que lo que tiene en la cabeza, como también tienen algunos argentinos, es un esquema mental que dice que en los países ‘normales’ debería haber un partido de centro-izquierda y un partido de centro-derecha, o cuatro partidos (de izquierda, centro-izquierda, centro-derecha y derecha). Si tiene ese esquema mental, es imposible que entienda el peronismo y yo creo que no puede entender ningún fenómeno político porque desde el principio del libro trato de explicar que los fenómenos políticos no existen sólo sobre una línea que va de izquierda a derecha, sino que tienen tres dimensiones. Hay que mirar la dimensión que va de arriba a abajo en lo social y la dimensión que va del dogmatismo al pragmatismo, en el sentido de que hay dogmatismos de derecha, hay dogmatismos de izquierda y hay pragmatismos también desde distintos puntos de vista ideológicos. Entonces, por ejemplo, el peronismo, como casi todos los partidos de gobierno que yo conozco, es un partido que tiene sus principios y que, al mismo tiempo, es altamente pragmático. En ese sentido, entender el peronismo requiere pensar en esas tres dimensiones, 3D, o 4D diría yo, porque hay una cuarta dimensión que es el tiempo, que atraviesa todos los fenómenos políticos. Ningún fenómeno político es indemne al paso del tiempo, ni está exento de irse transformando. Por eso, el libro lo que hace es profundizar en ocho momentos, mostrando la complejidad de estas distintas dimensiones de la política”, se explayó el académico.
Luego explicó que “en el libro trabajo el surgimiento del peronismo y su relación con el antiperonismo porque en las ciencias sociales hay un principio elemental que dice que no existen fenómenos sociales o políticos que no sean relacionales, es decir que no estén en relación a otra cosa. Por eso le dedicamos en el libro un análisis detallado, un capítulo completo a esa relación”.
Por último, Alejandro Grimson analizó que “después de Menem, después de la crisis del 2001, parecía que el peronismo estaba altamente debilitado. Fue dividido a una elección, en 2003, en donde hubo tres candidatos. Néstor Kirchner asume con muy pocos votos, con el 22% de los votos y justamente volvemos a lo que decíamos al inicio: el peronismo es altamente heterogéneo, y lo que logra Kirchner en ese proceso histórico es construir una nueva síntesis de esa diversidad, que como en otros casos incluye tanto a distintas corrientes del peronismo como a corrientes que no son peronistas. Posteriormente, hay un resurgir de la intensidad, de la fuerza de las identidades peronistas. Estaban mucho más debilitadas en 2001 que en 2010, digamos. Estaban mucho más debilitadas en una generación anterior que en generaciones posteriores, entonces hay una suerte de resurgimiento. Y lo que estamos viviendo en la actualidad es cómo, otra vez, a partir de situaciones de división del peronismo, a partir de situaciones donde esa heterogeneidad no encontraba puntos de acumulación y de síntesis, se fue produciendo el año pasado, a partir de mayo, un proceso de una nueva síntesis que es la que está gobernando actualmente”.