A pesar de que los republicanos mantuvieron la mayoría en la Cámara Alta, con al menos 51 senadores, se espera que el cambio en el equilibrio de poderes de Estados Unidos pueda limitar al presidente Trump, quien ha contado con el apoyo de los tres poderes del Estado durante sus dos primeros años.
¿Qué ocurrirá con la agenda de Trump?
Han sido unas “elecciones existosas”, según declaró el presidente estadounidense a través de su cuenta de Twitter, luego del anuncio de los resultados de las mid-terms. También ha mostrado un acercamiento a quien será la posible líder del partido demócrata en la Cámara Baja, Nancy Pelosi. La necesidad de lograr un mayor consenso con los demócratas puede deberse a que muchos de los proyectos de su agenda política están en juego. Entre ellos la construcción del muro en la frontera con México y la reforma migratoria, que han generado varios descontentos en la opinión pública. Lo mismo ocurre con la derogación del Obamacare en el sistema de salud. Otras reformas también han sido fuente de críticas por varios sectores de la “ola azul”, como en el caso de la reforma impositiva lanzada a fines de 2017 que fijaba la reducción temporal de impuestos a la clase media y la reducción permanente a las empresas. Sin embargo, existe la posibilidad de que se alcance un acuerdo bipartidista en la inversión en infraestructura y la reducción de los costos en medicamentos.
Nuevas figuras en el Congreso
Frente a las fuertes declaraciones de Trump en contra de los derechos de las mujeres y a sus intentos de instalar una política migratoria más restrictiva, la resistencia de las mujeres y de las minorías se hizo sentir en las elecciones. Luego del amplio movimiento MeToo y del impacto de las acusaciones de abuso sexual contra el actual juez de la Corte Suprema Brett Kavanaugh, las mujeres han arrasado en las elecciones, obteniendo al menos 117 escaños. La conformación de las Cámaras refleja una mayor diversidad y el peso de las minorías en la política estadounidense. Entre las candidatas elegidas, Ilhan Omar (Minnesota) y Rashida Tlaib (Michigan) se han convertido en las primeras mujeres musulmanas en llegar a la Cámara de Representantes. Sharice Davids, demócrata por Kansas, lesbiana y defensora de los derechos de las mujeres también ocupará un escaño. Junto con Deb Haaland son las primeras mujeres de origen indígena en llegar al Congreso. Una de las figuras de mayor impacto en estas elecciones fue Alexandria Ocasio-Cortez, la joven de origen puertorriqueño, elegida por el 14 distrito de Nueva York, que con tan sólo 29 años será la congresista más joven en la historia de Estados Unidos.
¿Posible impeachment?
El control de la Cámara de Representantes por parte de los Demócratas podría otorgarles la capacidad de iniciar un impeachment contra Trump en el caso de que haya cometido delitos graves. Esta cuestión está relacionada con la investigación de la trama rusa en las elecciones presidenciales de 2016, la cual afecta de manera directa al presidente. Sin embargo, para poder lograr la destitución se necesita de la aprobación de dos tercios de la Cámara de Senadores, haciendo poco viable esta opción. Pero los demócratas podrán impulsar nuevas investigaciones sobre los negocios privados de Trump y presionar para que haga pública la declaración de sus impuestos.
Pero al día siguiente de las elecciones, el presidente Trump forzó la renuncia del fiscal general Jeff Sessions, quien estaba a cargo de la investigación de la trama rusa. Quien ocupará su lugar será Matthew Whitaker quien en una de sus declaraciones ha dicho que “no se necesita a un abogado o a un antiguo fiscal federal como yo para concluir que investigar las finanzas de Donald Trump o de su familia se sitúa completamente fuera del ámbito de su campaña de 2016 y las alegaciones de que la campaña se coordinó con el Gobierno ruso”.
Por estos motivos, habrá que esperar para ver el impacto del cambio en el equilibrio de poder del Congreso estadounidense. Por el momento, se proyecta el fin de la agenda republicana unilateral y la posibilidad de que se constituya un fuerte contrapeso al poder de Trump. Si bien la tradición histórica de Estados Unidos refleja que la pérdida de la mayoría en la Cámara Baja no ha impedido la posibilidad de ser reelecto (como ocurrió durante la administración de Clinton y de Obama), falta aún un largo camino que recorrer para las presidenciales del 2020 en los Estados Unidos.
(*) Colaboradora de Fundamentar.com