Entre las víctimas se encuentran Shiri Bibas, sus hijos Ariel y Kfir, y Oded Lifshitz, un hombre de 83 años. Kfir Bibas, quien tenía solo 9 meses al momento de ser capturado, era el rehén más joven. Según Hamás, los cuatro murieron junto con sus guardias en ataques aéreos israelíes.
"Nuestros corazones, los corazones de toda una nación, están hechos jirones", expresó el presidente israelí, Isaac Herzog. "En nombre del Estado de Israel, inclino la cabeza y pido perdón. Perdón por no protegerlos en ese día terrible. Perdón por no traerlos a casa sanos y salvos". Los cuerpos fueron entregados en la Franja de Gaza en un acto público, donde militantes de Hamás exhibieron ataúdes negros rodeados de pancartas, incluida una imagen del primer ministro Benjamin Netanyahu caricaturizado como un vampiro. Los ataúdes fueron trasladados en vehículos de la Cruz Roja hacia las fuerzas israelíes.
El Ejército israelí ha iniciado un proceso de identificación formal mediante análisis de ADN, un procedimiento que podría tardar hasta dos días. Mientras tanto, las familias de las víctimas deberán esperar la confirmación oficial para realizar los funerales.
La tragedia de la familia Bibas y Oded Lifshitz
Shiri Bibas fue secuestrada junto a sus hijos Ariel, de 4 años, y Kfir, de 9 meses, durante el ataque de Hamás. Su esposo, Yarden Bibas, fue tomado por separado y liberado tras 16 meses en cautiverio. La familia había celebrado los cumpleaños de Kfir y Ariel durante su cautiverio, manteniendo la esperanza de volver a verlos con vida. La comunidad israelí mostró su solidaridad vistiendo de naranja en honor al cabello rojizo de los niños, y una canción infantil fue escrita para ellos.
Oded Lifshitz, también secuestrado en el ataque, era un periodista reconocido por abogar por la paz y los derechos palestinos. Su esposa, Yocheved, fue liberada en noviembre de 2023 durante un alto el fuego.
El ataque del 7 de octubre de 2023 por Hamás resultó en el secuestro de 251 personas, incluidos unos 30 niños, además de causar la muerte de más de 1.200 personas, en su mayoría civiles. Desde entonces, más de la mitad de los rehenes han sido liberados a través de acuerdos de alto el fuego o negociaciones. Sin embargo, decenas han sido hallados muertos, ya sea en el ataque inicial o durante su cautiverio.
La entrega de los cuerpos ha sido un recordatorio doloroso de las vidas perdidas en cautiverio, pero también podría influir en las conversaciones para extender el alto el fuego, cuya primera fase está programada para terminar a principios de marzo. Israel sigue enfrentando el desafío de recuperar a los rehenes restantes y brindar respuestas a las familias que aún esperan noticias sobre sus seres queridos.
Hamás afirmó que está dispuesto a liberar a todos los rehenes que quedan en la Franja de Gaza durante esa segunda fase de la tregua. Israel y el grupo palestino, considerado una organización terrorista tanto por Estados Unidos como por la Unión Europea, están actualmente completando la primera fase del alto el fuego, que entró en vigor el 19 de enero, durante la cual 19 rehenes israelíes han sido liberados a cambio de más de 1.100 presos palestinos detenidos en cárceles israelíes.
FUENTE: Euronews