De acuerdo a los cálculos del Gobierno nipón ya se cumplió el plazo de 72 horas que el grupo Estado Islámico (EI) dio a Japón para el pago del rescate por los rehenes Haruna Yukawa (47) y Kenji Goto (42).
Tokio estableció las 14.40 (2.50, hora en Argentina) de hoy como el fin del plazo dado por el EI en un vídeo en el que reclamaba 200 millones de dólares al Ejecutivo japonés con el fin de salvar la vida de los rehenes.
Pocas horas antes de que se cumpliera el plazo, la madre de Goto, periodista especializado en zonas de conflicto, hizo un llamamiento al EI para que liberaran a su hijo.
Desde el martes, el Gobierno nipón llevó a cabo una intensa campaña de contactos con líderes internacionales, incluidos los de varios países de Oriente Medio, buscando apoyos para superar la complicada crisis.
En una presentación ante los medios, Junko Ishido, dijo que su hijo no es un enemigo del Estado Islámico y recordó que Japón es un país pacifista que no se involucra en conflictos bélicos.
El Gobierno del primer ministro, Shinzo Abe, insiste en que no recibió comunicación directa por parte del grupo yihadista en relación a plazos concretos, por lo que considera que se cumplieron 72 horas después de que se tuviera noticias del vídeo, que fue subido a internet el martes.
Yoshihide Suga, ministro portavoz del Gobierno nipón, explicó hoy que: "Hemos recibido todo tipo de informaciones pero no hemos sido capaces de confirmar en qué estado se encuentran" los rehenes, consignó EFE.
Por su parte, Abe volvió a pedir a sus ministros, durante una reunión de emergencia realizada hoy con su Gabinete, que hicieran todo lo que estuviera a su alcance liberar a los dos ciudadanos japoneses.
Desde el martes, el Gobierno nipón llevó a cabo una intensa campaña de contactos con líderes internacionales, incluidos los de varios países de Oriente Medio, buscando apoyos para superar la complicada crisis.
Además, el Ejecutivo japonés reveló que trató de establecer contacto con el Estado Islámico a través de "varios canales" en territorio sirio, entre ellos líderes de grupos armados y mediadores de las comunidades locales.
FUENTE: Minutouno